Dos Perfectos Extraños

IGUALES Y EXTRAÑOS -  ARGENTINA 2020 ©carlos velis/Paneo fotografía Digital

Hace un tiempo dos ALMAS que caminaban juntas  desde hace unos años, felices, vivaces y muy enamoradas. Un día, el DESTINO les presentó en su camino una intersección, de esas donde toca tomar decisiones de VIDA; era parte del pacto que habían fijado cuando decidieron caminar JUNTAS.

Y así, llenas de emoción e ilusión, se tomaron de la mano para  emprender el viaje, donde la magia estaba en todo lo que tocaban, en cada beso y hasta en la manera de mirarse, sus risas, esos momentos de pasión, sin olvidar los instantes más sublimes y espirituales. Cada día era una experiencia única.

Ellas se encontraban tan sumergidas en ese mundo mágico  que, sin darse cuenta, se concentraron en sentir lo que se suponía que debían sentir. Sin embargo, la realidad es que ellas, realmente, no sabían lo que debían sentir… Era como mirar el SOL directamente: Sabes que no lo debes hacer pero no puedes evitar mirarlo. Se sentían LIBRES por un momento sin caer en ese cliché de las relaciones de las otras parejas pero, finalmente,  sin darse cuenta, caen en él en una caída, libre sin freno.

Mientras más cercanas estaban, su vista estaba más nublada que nunca… ¡¡¡Cambiaron!!!

Ambas ALMAS pensaban que les arrebataron la ALEGRÍA, la LIBERTAD. Ella necesitaba que él fuese mucho más fuerte, más estable de lo que solía ser y él, simplemente, no lo fue...

Es tan difícil ser y estar... Te limitas a ser fuerte por los demás, hasta olvidar que eres otro HUMANO más en el MUNDO.

 La preocupación llega y la pregunta hace ruido: ¿Qué crees que haces? Y entre tantas posibles respuestas  embriagados dicen: "Es TIEMPO de un descanso de tanto AMOR"… Y en  la banca  lo sentaron, por un año o menos para una de las partes.

 En el juego de la VIDA y del AMOR puedes ver la VERDAD pero, al final, te puedes dar cuenta que no existe la VERDAD absoluta... Todo es mera perspectiva… No puedes perseguir a la VERDAD.

 

Carlos Velis.